POZO CAÑADA
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CANTO A LA MUJER MANCHEGA Yo me casé,por orgullo, con una mujer manchega, que es el reflejo genuino del corazón de esta tierra. Limpia,como los veneros del agua fresca y somera que aflora soñando mares por los ojos de Ruidera. Pura,como el vino blanco que hierve en vieja solera. Hermosa,como la vírgen que en los Llanos se venera. Por voto de mis amores, le dí mi vida y mi hacienda, y desde entonces hay risas y felicidad en mi aldea. Han crecido los pinares, hay más grado en la bodega, más trigo en nuestros trigales, más flores en primavera. Mi vida,oculta en el ocio de una existencia labriega, lozana desde aquel día retoña en su sabía nueva, como bancál de arrompío que bate la vertedera. Y es,que es tan dulce la vida, con una mujer manchega, que no se nota el trabajo ni hay sinsabores ni penas. Cada frase,una sonrisa. Cada palabra,una arenga. Cada mirada,un reflejo del Sol que se reverbera y cada paso un camino que a buen destino te lleva. Para todo tiene halagos, y el aire de su presencia lleva en pós,la simpatía de quien convive con ella. porfíanse las ovejas, que va a ordeñarlas el ama, y es un honor ser primera. Por las"trasnochás",la Luna con ella charla y remienda. Le tapa al nene la mano que se dejó descubierta. Observa un rato mi sueño, y silenciosa me besa, sellando sus labios rojos el cese de la faena. Como el canto de la alondra que trinando nos despierta, llama a los rudos muleros que pecan pensando en ella. Al pavo real,que ufano le hace a la pava la rueda. Al Sol que tímido sale, y al pastorcillo que sueña en un nido de jilgueros con jilguerillos de seda. Al palomar,que encendido de llama azul despereza, y en resumen,a la vida que con la mañana empieza movida por el resorte de su rústica belleza. En septiembre,cuándo vamos con las mulas a la Feria; con un pañuelo turbado en su anillada cabeza, oliendo a azafrán tostado a hinojo y a hierbabuena, no hay quien al pasar no mire, ni quien al mirar no vea, a la mujer del terruño a la auténtica manchega. Aquella que a don Quijote tantas noches tuvo en vela. Esta que amasa el pan blanco y hace con los dedos cuentas, que a la corta o a la larga casi siempre salen ciertas. Esta que me cose el traje y el baberico a la nena. Aquesta vulgar señora, que suelen llamar paleta porque no se tiñe el pelo, ni lleva roña en las cejas, ni le dice"chuchi"al nene y a la pachona Enriqueta. Aquí en este paraíso -que bien llamarlo pudiera- no ha falta que vengan médicos, ni boticas,ni parteras. Ella sóla se los pare y ella misma los arregla. Y me cria unos chiquillos, coloradicos como tejas. Sanchos Panzas de juguete, que aún arrastran la panceja y ya se van con la burra al pueblo,a llevar las rejas. Por la mañana,un cazurro de gachasmigas ruleras se comen,y no han tenido ni unas malas paperas. Y es,que son de buena raza. Hijos de madre manchega, que tiene la sangre vírgen de vicios y de impurezas. Sangre"filtrá" en la besana, en la ermita y en la artesa, que eso es decir:...castidad, santidad y fortaleza. |